Romina

            Le cuesta levantarse un día más, no es que haya perdido las ganas, es que no las encuentra. Ella lo decidió, aunque ahora no sabe si fue lo mejor. Toca semana intensa de Posgrado en la Universidad Jesuita de Guadalajara, como cada mes, y aún quedan más meses de los que han pasado.

Tiene que poner buena cara, a nadie le importa su sufrimiento, a nadie le importa su soledad. Ella debe ser, y es, la sonrisa emergente del grupo. Siempre ha sido así, siempre ha creído que una sonrisa abre puertas que luego deberá decidir si cruzar.

Suena la radio, aparece la nueva canción de moda, aunque luego comprobará que no es para nada moderna. Salió al mercado el mismo año que ella salió de la barriga de su madre, pero Tiktok la ha puesto de nuevo en el candelero. Dicen de él que era el cantante argentino más mexicano de todos, ¡será porque se nacionalizó!

Era Diego Verdaguer, uno de esos famosos que, como a tantos anónimos, la Covid se llevó, sin que él viera el éxito que su canción de los ochenta, ¿Usted qué haría?, tendría con los minivídeos de la red social:

Miren si en esta vida nos dieran otra oportunidad
Miren si se pudiera parar el tiempo, volverlo atrás
Miren si se pudiera con experiencia recomenzar
Miren si se pudiera borrar las cosas que hicimos mal

Usted, ¿qué haría?

Sin darse cuenta está bailando, sin darse cuenta se lo está planteando:

Miren, si en esta vida pudiera volver atrás, y decidir qué carrera estudiar.

Miren, si en esta vida pudiera volver atrás, y decidir si quedarme en Canarias o regresar.

Miren, si en esta vida pudiera volver atrás, y con mi primer amor, volverlo a intentar.

Miren, si en esta vida pudiera volver atrás, y ser yo quien a mi ex dejara.

Miren, si en esta vida pudiera volver atrás, y mi madre salvase del incendio a mi hermano, y no a mí.

Ahora se da cuenta, y sabe que:

Si volviera atrás, no sería ella.

Si volviera atrás, no aprendería.

Si volviera atrás, no crecería.

Si volviera atrás, no tendría a su hijo.

Por eso, ahora que se acaba la canción de Verdaguer y suena Tattoo, la ganadora de Eurovisión, sabe que todas sus experiencias son tatuajes sin tinta, de lo que es ella. Por eso en efecto «It’s time to say goodbye» al pasado. Y a vivir el presente, con una sonrisa.

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